Como era de esperarse, Jeff Kinney, lo hizo otra vez. La serie de libros escritos por este autor, abraza un nuevo tomo. Seguimos compartiendo las experiencias y novedades de la vida de Greg, por explicaciones de él mismo. Su paso por la secundaria ha dejado huellas en la vida de quienes siguen a Greg, mediante la lectura de sus anécdotas, siendo su lenguaje elocuente, gracioso y sincero; tal como se expresan los jóvenes, haciendo que podamos palpar los sucesos ocurridos en su vida y sentirnos identificados con el protagonista. En este caso, comienza el relato con la nueva aventura a la que se van a adentrar Greg y su familia en las vacaciones de verano; tienen planificado cruzar el país e irse de camping, para disfrutar de un tiempo agradable y familiar. Sin embargo, algo se sale de la norma, no habían planificado pasar por esa situación; al final del día terminan en un estacionamiento de caravanas, lo cual desencaja por completo con los planes que traía la familia entera, de hecho, este cambio inesperado no era para nada placentero. Y, como postre, repentinamente se abren los cielos, el agua empieza a crecer y ellos no saben qué hacer. Todo esto hace que la familia Heffley comience a pensar seriamente si han perdido sus tan ansiadas vacaciones, o si aún están a tiempo de salvarlas.
